Descripción
El monocromo no tiene por qué ser monótono. Este papel pintado no tejido lo demuestra. Lo que a la distancia parece una superficie monocromática se convierte, de cerca, en una emocionante armonía tono sobre tono de dos tonos con un efecto denso. Su fina textura evita pequeñas imperfecciones en la pared, y un toque de brillo le da al color un toque de glamour. El sofisticado antracita representa la elegancia pura y crea una sensación de orden interior. Este papel pintado da la bienvenida a los invitados en un pasillo, pero es igual de impresionante en el salón o el dormitorio. Gracias a su reverso no tejido, es increíblemente fácil de instalar: aplica la cola a la pared, inserta el papel pintado, presiónalo y listo. Si te apetece un cambio de aires, puedes retirarlo con la misma facilidad: seco y en tiras completas.